Montse es otra mami de una diosa etíope, una niña relamente hermosa, con una sonrisa perfecta, una naricita que arruga cuando se ríe y unos ojos etíopes , lo que significa, PRECIOSOS.
Hana , un año después del encuentro con su mami , la abraza con todo el amor del mundo. Ambas son felices y esto es lo que cuenta su mamá en su primer año juntas.
"...hoy, hace un año aterrizaba en Addis Abeba para encontrarme con Hana,
seis días después del juicio, un mes después de la asignación, casi dos años
después de la primera gestión formal que me llevaría a ella. En medio, y
desde entonces, mil cosas.
...la mayor consciencia que tengo es lo mucho que he aprendido, bueno; que
ambas hemos aprendido. Y la mayor certeza que atesoro es cuanta complejidad
he vislumbrado desde el sencillo (aunque no es poco) deseo de ser madre y
serlo a través de la adopción, y lo que pienso de ella tres años después,
infinitamente menos inocente, y gracias a eso -que agudiza tus sentidos-,
inevitablemente más feliz.
Mi tránsito por el proceso, compartidas muchas historias, es realmente, un
tránsito fluido. Aunque creo que las historias que nos relacionan son
siempre de todos los que en ellas participamos, los que la conocen
coincidirán conmigo en que el mérito es fundamentalmente de Hana. Mi hija
tiene mucha fuerza, física y emocionalmente hablando; y su presencia, como
dice una amiga "me ha convertido en mejor persona".
Creo que ser mejores supone partir del hecho de que somos simples mortales y
que cuanto sucede y nos sucede debe llevarnos a crecer. Crecer en
conocimientos, en habilidades, y en emociones. Y eso ha hecho Hana,
obligándome necesariamente a la búsqueda de información; exigiéndome, en lo
compartido, el desarrollo de habilidades y sobretodo, dándole a mi corazón
-o lo que sea- la oportunidad de emocionarse con los más mínimos detalles,
las más interesantes perspectivas, y los hechos más esenciales y
trascendentales de nuestra vida en común.
Lo recuerdo con claridad, media hora antes de encontrarla, parada frente una
ensalada, yo no podía dejar de llorar, estaba a punto de materializar la
decisión más trascendental de mi vida y temía no haber tomado la correcta
para ella. No sabía si para ella MI decisión era buena. Tampoco lo se hoy,
pero al menos creo que por ahora, es feliz y mi vida con ella, es sin duda,
una mejor vida.
Aunque creo que todos los momentos implican retos soy consciente que
superado este primer año con felicidad, los grandes esfuerzos pertenecen a
otro momento del futuro. Soy inevitablemente consciente, profesional y
personalmente, de lo que supone la formación y la consolidación de la
identidad y no creo que lo tengamos fácil, ni ellos; nuestros hijos, ni
nosotros; al menos no en este lugar del mundo. Por ahora nos iremos
preparando y seguramente sentando las bases para que eso pueda ser "más
sencillo" si es que esa expresión puede tener cabida en la adolescencia. ;-)
y lo dicho "...vamos viendo".
Por eso os sigo viendo -y extrañando "Adopción en África"...definitivamente
la distancia nos da mucha perspectiva y habitualmente la opción de enfocar
mejor. Correr sin medida... ese sólo mirar el tiempo que falta, solo nos
deja cansados, así que no corráis que el camino apenas empieza...y nuestros
hijos llegan y merecen que no estemos cansados. Que energías, físicas y
emocionales, son las que nos piden después...
Estamos de aniversario, sólo eso. Y me gustan, porque me obligan a recordar,
que como dice Galeano es "volver a pasar por el corazón".
Feliz domingo...
Montse&Hana"
Gracias Montse por permitirme poner en mi blog tus sentimientos . Un beso enorme para vos y para Hana ... gracias por la fotito , es un regalo enorme para mi alma en esta espera.
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